A pesar de que Chile cuenta con un creciente número de usuarios en Facebook y Twitter, son pocos los que saben lo que pueden o no hacer en las redes sociales.
Suplantación de identidad
Por lejos uno de los usos indebidos más frecuentes en las redes sociales, la suplantación de identidad -a veces con propósitos humorísticos, como es frecuente en Twitter-, es severamente penada por sus administradores con el cierre inmediato de las cuentas. En este caso, la persona afectada debe denunciar el plagio del perfil creado sin su autorización confirmando su identidad. ¿Cómo? Se puede enviar alguna fotografía con un mensaje específico al menú de contacto de estas redes . Si no es suficiente, se debe acreditar a Facebook mediante documentación (carnet de identidad o generalmente pasaporte). Hay casos en el extranjero: hace un par de años la justicia inglesa decidió que un suplantador de Facebook pagara a su víctima tres mil dólares por daños morales.
Si la suplantación llega a la mala utilización de un mail, el abogado Claudio Magliona recomienda acudir a la Brigada del Cibercrimen- que puede localizar sin problemas al suplantador- o hacer la denuncia pertinente en la Fiscalía.
Bloqueos por denuncia
Los casos más drásticos de bloqueos temporales o denuncias suelen venir por parte de las mismas redes sociales, pero también existe otro tipo de bloqueo: por denuncias de usuarios afectados por los comentarios o contenidos compartidos en Twitter. El cierre de una cuenta puede ser producto de denuncias masivas por parte de usuarios: 300 personas son suficientes para alertar al sistema de Twitter y generar la suspensión automática de la cuenta que luego pasará a una revisión personal para determinar la gravedad de la infracción. Si las denuncias se deben a spam -mensajes indeseados-, la cuenta es cerrada de inmediato.
En los términos de servicio de Twitter se hace mención a su facultad de dejar de proveer los servicios -sin previo aviso- en cualquier momento. Algo similar ocurre con Facebook, que tampoco envía avisos previos para notificar una infracción y dar la posibilidad de corregirla, sino que una vez cesado el servicio informa del cierre de la cuenta.
Fotos: hasta 70% de piel
Según lo indicado en la declaración de derechos y responsabilidades de Facebook, no se debe publicar contenido hiriente, intimidatorio o pornográfico y que, por ende, implique desnudos o violencia gráfica. Los usuarios de la red social suben imágenes sin tener claro que las fotografías no son consideradas «indebidas» por interpretaciones de personas, sino que «un sistema automatizado que va monitoreando porcentajes de piel es el encargado de detectar las imágenes que no pueden subirse», comenta Horacio Garay, experto en redes sociales de Media Interactive. Si una imagen presenta alrededor de un 70% color piel, se filtra esa cuenta y se envía a una lista de espera en donde será revisada para evitar errores del sistema de Facebook. Dependiendo de esa última resolución, la cuenta inhabilitada temporalmente es nuevamente activada al determinarse que no son contenidos violentos o desnudos explícitos.
Twitter, en cambio, no aloja imágenes en su página, sino que utiliza servicios externos que, en su mayoría, siguen la regla de Facebook.
Ventas en Facebook
Muchas personas han aprovechado la red social para vender productos e incluso han hecho páginas especiales o utilizado su perfil de Facebook como una tienda virtual. Y a pesar de que no signifiquen necesariamente transacciones que terminen en engaños, lo cierto es que Facebook también lo prohíbe. El perfil no puede ser ocupado para generar ganancias comerciales e incluso se da como ejemplo el realizar transacciones dentro del «muro». Sin embargo, en este caso la regla no ha sido muy estricta, porque se haría efectiva sólo cuando el sistema detecta la publicación de datos personales, como direcciones, números de teléfono o mails. «Con el fin de evitar posibles negocios y preservar la integridad de otras personas que pudieran ser estafadas, Facebook opta por cancelar la cuenta», dice Horacio Garay. De todas formas, son muchos los que han pasado largo tiempo sin que Facebook detecte sus tiendas virtuales, ya que las ventas se hacen a través de mensajería interna, pero cuando son detectados, el cierre afectaría a la tienda y el perfil del creador.
Derechos de autor
Compartir contenido como música, videos y fotos es una parte esencial de la experiencia de las redes sociales. Aunque muchos lo desconozcan, también puede ser una de las causas más comunes para recibir un correo de advertencia hasta el cierre de una cuenta. Por ejemplo, subir a un álbum en Facebook o Twitter una foto de algún político, artista famoso e incluso logos de marcas. Es por lo mismo que tanto Facebook como Twitter, a través de servicios para subir fotografías como Twitpic e Yfrog, recuerdan constantemente a los usuarios no subir fotos que no sean de su propia autoría. A pesar de esto, existe también una ley de «uso justo», a la cual los usuarios pueden apelar en caso de recibir una advertencia. Los términos de Facebook indican que «si retiramos tu contenido debido a una infracción de los derechos de autor de otra persona y consideras que ha sido un error, tendrás la posibilidad de apelar», mientras que Twitter requiere demostrar a través de una fotografía o correo electrónico que efectivamente se ejercen los derechos sobre el contenido.
Fuente: La tercera, Domingo 20 de febrero del 2011